Hay que aprender a confiar y lo se, pero también hay que fijarse bien en quien confiamos. Yo confié, ciega, en una persona que no tendría que haberle creído nada. Por su culpa, por tragarme una por una sus mentiras, hoy me falta una pieza que hace unos pocos días con solamente un mensaje hacia que mantenga una sonrisa todo el día. Tenías el poder de cagarme el día como de alegrármelo, conseguimos juntos algo tan lindo, tan raro no sabíamos ni como explicarlo. Pero él (conociendo todo esto) hizo que tropecemos todos esos pasos adelante que habíamos dado, disfrutó conciente de tu dolor y también del mío, se rió y estoy convencida que sigue riéndose de nosotros, así son las personas que nunca lograron ni van a lograr nada, gozan el sufrimiento ajeno. Sabes que es lo más raro? Después de todo esto todavía no se nombrar lo que me pasa con vos, no entiendo porque tuvimos que conocernos, porque no puedo olvidarme de tu cara, de tus palabras, de tu voz, de tu forma de caminar y de reírte, de tu sonrisa, de ese abrazo tan fuerte que nos dimos con miedo de no volvernos a ver, de cada cosa que me decías que yo ilusa pensaba que eran sentimientos que recién los estabas estrenando conmigo. Pero no te confundas, no te culpo de nada, vos sos víctima igual que yo. Lo culpo a el, que nos uso como tiro al blanco y nos clavo uno por uno sus dardos. Asesino. Lo que haya quedado de esto tan nuestro (que es muy poco) lo vamos a vivir a la defensiva, protegiéndonos de todos, vamos a desconfiar hasta de nosotros mismos, y nos vamos a volver débiles, nos vamos a destruir juntos en vez de fortalecernos. Las palabras no bastan, necesito volverte a ver, pero tu presencia me blockea, me dejas muda, con miedo, distante, lejos. Como antes, como siempre… separada por muchos kilómetros de vos. Mi cabeza se aturde, la mirada se nubla y quiebro, yo pensé que no creía en nada, pero creo en vos, me diste ganas de creer. Pero te vi y no pude decirte nada, se me paralizo el alma, solo quise que escuches nuestra canción, porque sigue siendo nuestra. Si estoy acá, sentada volviendo a escribir para vos es porque tengo razones, te quiero por lo que conozco de vos me encanta, porque todavía no me lastimaste, porque sigo creyendo en vos y porque encontrarte en mi vida, en mi mundo, fue hermoso y todo eso no se olvida porque si, aunque fuiste un flash… pensé que ibas a ser eterno y hoy ya todo esta terminado y pienso: listo, ya esta, terminó, fue un flash. Estoy odiándome por varios motivos, por haber creído en alguien que jamás podría alegrarme de tal manera un día como vos, en alguien tan poca persona, tan poco amigo y a su vez odio no poder olvidarte, como vos pudiste hacerlo conmigo, estoy peleándome conmigo misma para ya no sentirte, para resignarme y conformarme con que lo bueno dura poco y que todo por algo pasa, que si estábamos destinados a serlo, en algún momento nuestros caminos se van a volver a unir, al menos por una noche como esa que vos y yo sabemos. Como termine escribiéndote antes: ''Ninguna situación es tan terrible que no sea susceptible de empeorar'' Me conoces, te conozco Me detestas y yo sin embargo te quiero, te admiro, mientras podría odiarte como vos a mi y esta historia terminaría acá, yo voy a luchar porque me creas, por volver a ver el vaso medio-lleno en vez de medio-vacío como lo dejamos ahora. Sabes que disimuladamente te estoy pidiendo de rodillas, casi rogándote que ''aunque te muerda la muñeca, nunca me sueltes la mano''. Voy a pelear por terminar mejor ésta historia que empezamos juntos, y que termino mal por culpa de terceros que no quisieron escribirnos un final feliz. Te quiero NC.