Hoy hace mucho frío fuera y dentro de mí. Pienso que tal vez siempre fue así pero estaba ciega, entonces ahora sí puedo darme cuenta porque ciertas cosas me fueron abriendo los ojos de a poco.Quise escaparme un poco de la realidad pensando que todo iba a cambiar con el tiempo, pero ya ves: en dias van a ser 6 meses y todo sigue igual. Mal.Este texto puede parecerte muchas cosas, incluso un texto como cualquier otro de los cientos que te escribí durante meses. Pero éste es diferente, es el de despedida. No me voy por una semana o por dos, me voy de tu vida para siempre porque sé que estoy de más. No me necesitás tanto como yo a vos y muchas veces me dijiste que en las relaciones hay que dar y recibir por igual; no se está cumpliendo esa regla. Siento que siempre sentí más que vos.Entonces digamos en nuestra relación no existe un equilibrio. O no nos vemos nunca, o estamos peleados… siempre hay un tema para discutir entre nosotros. No tuvimos ni una sola semana de paz en seis meses. Creo que es importante un poco de relax, creo que llegó el día, ¿no?El tema de vernos más seguido también quedó en la nada. Ya ves: durante el año te veo (si se te antoja) dos veces por semana. ¿Qué tiempo me dedicas de tu vida? ¿Cuatro horas por semana? “Con respecto a vernos más seguido, sabés que se complica un poco: mis horarios, los tuyos, estamos un poco lejos, etc; pero vamos a tratar”. No. No te creo una palabra más. Olvidate.A los dos nos gusta que el otro nos diga cuánto nos quiere, pero ninguno de los dos obtuvo nunca lo que quiso. Nunca fue bastante, no nos alcanzó. Tal vez a vos sí te alcanzó, porque no necesitaste nunca verme. Pero no fue suficiente para mí, que te quise con el alma y no podía verte jamás. Tampoco tuviste en cuenta que además de escuchar “te quieros” hay que demostrarlos. Shakespeare dijo alguna vez: “no ama quien no lo demuestra”. Creo que describe perfectamente el “amor” que me tenías.“Pendeja, no lastimes a quien necesitás, tirá tu orgullo a la mierda alguna vez”. Me parece que te hice demasiado caso. Dejé que hicieras lo que quisiste, que vinieras cuando quisieras, que hicieras y deshicieras sin importarte nada de mí. ¿Pensás que sos el único que extraña?Además, había muchas diferencias entre nosotros. Pero la más notoria era que yo no me quería nada y vos te amabas demasiado. Tanto que en vos no había lugar para mí. Tal vez encuentres a alguien a quien ames tanto como te amas a vos mismo y ese va a ser el amor verdadero. Es un consejo, si yo no lo aguanté, creo que nadie lo va a aguantar, porque yo con esas cosas soy bastante paciente. Es solo un consejo.La pregunta es: ¿por qué no me dijiste desde el principio que te habías tomado nuestra relación de otra manera? ¿Por qué no me advertiste? Te hubiera amado menos, te hubiera dado menos. Ahora estoy atada a vos y es un infierno; por eso decido alejarme ahora. Porque si seguimos con esto que no tiene nombre, voy a quererte cada día mucho más y no es eso lo que quiero. Tal vez no tendríamos que haber desafiado a nada ni a nadie, y vos tendrías que estar con alguien de tu edad y yo con alguien de la mía. Lo que más duele es que nunca tuve prioridad en tu vida. Tu felicidad era condición única para que yo estuviera bien. Siempre te tuve arriba, como el religioso tiene a Dios. Pero yo nunca te interesé demasiado, sino hubieses tenido más ganas de verme. Tal vez tantas como yo. Nunca tuve prioridad en tu vida, mientras que vos fuiste todo en la mía.Ni como novio, ni como hermano, ni como amigo; me duele verte, escribirte o escucharte. Este es el último texto, espero que sepas que no me adapté a tu estilo de vida, a tu filosofía de vida “Light”, cero obligaciones conmigo. No era eso lo que quería para nosotros.Yo escribo esto suponiendo que vas a entender porque se te ve un tipo inteligente. Así que a partir de hoy, voy a empezar de nuevo. No quiero hablar con vos. No quiero verte, no quiero escucharte. No me gustó tu “manera”. Tal vez cuando sea más grande me acuerde de vos y entienda lo que me habías querido decir. Quizás ya lo entendí. Por eso hoy, hoy que quiero decidir, prefiero estar con alguien que me quiera a mi manera.
PD. Pero como te quise yo, no te va a querer nadie.